Gracias a mi buen amigo Nano, he conseguido concertar una cita con Matias Prats, una tarde de invierno. Es en la propia casa Antena 3 donde, antes del informativo, hemos quedado para realizar una pequeña sesión fotográfica.
Dejo el coche frente al edificio, en un aparcamiento saturado de coches y desde allí llamo para que Nano me diga por donde debo pasar. Vale! justo al lado contrario, en fin… cargo y me dirijo hacia la puerta donde ya me está esperando.
Nos dirigimos por entre amplios pasillos hasta un despacho grande y de momento solitario donde voy a poder montar con holgura un fondo y dos flashes, y donde por supuesto allí no vamos a molestar a nadie. Tras dejar preparado el set, parece que aun nos queda tiempo, así que lo empleamos en bajar a tomar café, hablar un poco de nuestras cosas y regresar a tiempo para no hacer esperar a Matias, que luego tiene trabajo.

Aparece poco después animado y dispuesto para la pequeña sesión que vamos a realizar. Nano nos presenta y nos deja allí charlando durante unos minutos, antes de ponernos con las manos en la masa. El escenario es mi preferido, el que utilizo en la mayoría de los casos, «nada» solo el personaje contra un fondo preferiblemente negro, en alguna ocasión blanco.
Le pido que por favor, se siente en la silla que le tengo preparada enfrente, termino de medir y mientras voy encuadrando la escena, seguimos charlando sobre sus cosas, vida, trabajo, en fin un poco de todo, para no perder la conexión. Siempre lo hago, hablo mucho y luego dejo que me cuenten sus cosas. Al mismo tiempo que aprendo de ellos, consigo ver sus expresiones o gestos mas habituales.

Después de varios disparos decidimos prescindir de la chaqueta y darle un aire mas informal. No nos queda mucho tiempo, pero estamos muy cómodos ahora, lo noto cuando me mira sonriente, apoyado sobre sus manos y… lo aprovecho. ClicK!

foto matias prats por pepe castro